Amor Verdadero
El sabado volví a ver "La princesa prometida", y ya van... No me canso de ver esta gran película de Rob Reiner. Tiene casi todos los elementos para que todos los públicos puedan disfrutar: acción, aventuras, comedia...y, por supuesto, amor, mucho amor. De hecho, toda la película gira en torno a la "imposible" relación entre Westley (Cary Elwes) y Buttercup (Robin Wright Penn), dos campesinos que van a tener que luchar, literalmente, para poder estar juntos. Después de ser separados y de que se diera a Westley por muerto, Buttercup accede a casarse con el Príncipe Humperdinck. Sin embargo, es secuestrada por el trio más raro de malhechores de la historia del cine: Vizzini, la mente, Íñigo Montoya, el español y Fezzik, el gigante. En su huida con la princesa se ven sorprendidos por un enmascarado que les va venciendo a cada uno en su terreno, hasta liberar a Buttercup. Por supuesto, este heroe no es más que Westley, que se ha convertido en un gran pirata.
La historia no acaba ahí, ya que el príncipe vuelve a romper el idilio bucólico, matando a Westley...o por lo menos, parcialmente. Entonces, vuelven a entrar en escena el español, que en su afán por vengar a su padre (mítica es ya su frase: "Hola. Me llamo Íñigo Montoya. Tú mataste a mi padre. Prepárate a morir...") ayuda a Westley a revivir para entrar en el castillo. En una alianza entre el gigante, el español y el pirata-campesino, vencen al principe, consiguen la venganza y recuperan a la princesa. Todo esto con una estructura muy interesante, ya que el narrador es un abuelo que le está leyendo la historia a su nieto presuntamente enfermo, lo que conlleva a constantes interrupciones, preguntas, desaprobaciones,etc.
Una gran película que llega a su punto álgido cuando Westley le dice a su amada la gran frase: "La muerte no detiene al amor. Lo único que puede hacer es devorarlo." Y es que no olvidemos que por muchas peleas, aventuras, situaciones cómicas, etc. este filme se centra en el amor con mayúsculas, el AMOR VERDADERO.
La historia no acaba ahí, ya que el príncipe vuelve a romper el idilio bucólico, matando a Westley...o por lo menos, parcialmente. Entonces, vuelven a entrar en escena el español, que en su afán por vengar a su padre (mítica es ya su frase: "Hola. Me llamo Íñigo Montoya. Tú mataste a mi padre. Prepárate a morir...") ayuda a Westley a revivir para entrar en el castillo. En una alianza entre el gigante, el español y el pirata-campesino, vencen al principe, consiguen la venganza y recuperan a la princesa. Todo esto con una estructura muy interesante, ya que el narrador es un abuelo que le está leyendo la historia a su nieto presuntamente enfermo, lo que conlleva a constantes interrupciones, preguntas, desaprobaciones,etc.
Una gran película que llega a su punto álgido cuando Westley le dice a su amada la gran frase: "La muerte no detiene al amor. Lo único que puede hacer es devorarlo." Y es que no olvidemos que por muchas peleas, aventuras, situaciones cómicas, etc. este filme se centra en el amor con mayúsculas, el AMOR VERDADERO.
2 comentarios
Txintxu -
Rodion -